- julio 26th, 2017 |
Pasar el día en el parque acuático es refrescante y divertido. A ellos les encanta… y solo por ver sus caras de felicidad perdonarás el agotamiento del día siguiente. Toboganes y carreras serán los principales protagonistas del día. También podréis nadar o bucear. Incluso, puede que saquéis un ratito para echar una cabezada y reponer fuerzas. Poned los superpoderes a tope y ¡a disfrutar!
1. Atentos al sol
Madre o padre con superpoderes: en las colas el sol pega de lo lindo. Si os decidís por ese tobogán en el que hay más gente que en la guerra, hay que protegerse. Mucha cremita, como decía aquel anuncio de hace años; alguna prenda con protección solar por si la cosa se alarga en demasía; y una gorra para completar el conjunto serán tus aliados. Puedes incluir, además, la barrita amarilla para reforzar la protección en rostro y hombros.
Recuerda que hay que evitar las horas centrales del día, cuando los efectos nocivos de los rayos del sol son mayores.
2. El bañador apropiado
Los toboganes con sus subidas, bajadas y, sobre todo, con sus golpetazos contra el agua, pueden hacerte perder el bañador. Elige bien el que te vas a llevar. Uno que sea cómode y de la talla correcta. Como te esté un poco grande… puede que en una llegada al agua le digas adiós. Y ya sabes lo que les pasa a los peques con las vergüenzas, lo mismo no te vuelve a mirar en todo el día ;).
3. No te olvides de los pies
Con tanta carrera para llegar el primero al siguiente tobogán es importante evitar el resbalón. No te olvides de usar chanclas, las clásicas cangrejeras o calcetines de piscina. Así también daréis esquinazo a los hongos que pueden proliferar en ambientes húmedos.
4. Seguridad ante todo
Es fundamental seguir las indicaciones de los monitores antes de tirarse por algún tobogán. Si acompañas a tus peques es importante dar ejemplo y que te vean hacerlo.
Por último, fijad un punto de encuentro por si alguno de los peques se despista. Un sitio fácilmente visible desde cualquier lugar del parque acuático será lo ideal. También es importante tener localizada la enfermería por si fuera necesario visitarla.
Con todo esto ya tendrás activados tus superpoderes. Solo te queda disfrutar de la jornada… y descansar después ;).
LOS SUPERPODERES DE ARNIDOL