- abril 6th, 2013 |
¿Quieres coger ideas de trucos de magia para enseñarles a tus hijos? Léelos antes de que desaparezcan y… ¡que empiece el espectáculo!
La asombrosa unión de clips
Enséñales a tus niños a unir dos clips sin necesidad de tocarlos! Parece imposible, ¡pero no lo es!
Diles que pidan a su público un billete de 20 € (ideal por su tamaño) y coloca los clips en los bordes del billete puesto “de pie” y doblado en tres.
Que tiren de ambas puntas del billete, poco a poco, y los demás verán cómo de pronto se abre totalmente el billete y… ¡saltan por el aire los clips unidos sin que los hayas tocado!
Practicad este sencillo y sorprendente truco y, cuando lo tengas por la mano, te funcionará siempre.
¿A qué esperas a dejarlos a todos con la boca abierta?
Oro parece, plata-no es
¿Quieres que triunfen en las fiestas de sus amigos? ¡Enséñales a quedarse con “el respetable” cortando un plátano en distintos trozos sin tocarlo y antes de pelarlo!
Necesitáis:
- 1 dado
- 1 aguja
- 6 plátanos.
Primero, preparad el truco:
A) Coged uno a uno los plátanos y, sin pelarlos, cortadlos en trozos: uno en dos, otro en tres, otro en cuatro, otro en cinco y otro en seis. El sexto plátano, dejadlo como está.
B) ¿Cómo hacéis para cortarlos? Clavad la aguja en un punto de la cáscara y poco a poco la vais presionando hasta que llegue al otro lado, pero sin atravesar el plátano en cuestión.
C) Una vez que esté la aguja dentro del plátano, movedla hacia un lado y hacia el otro, suavemente, para hacer cada corte.
D) Repetid la acción en cada plátano y luego marcadlos con un marcador de forma que sepáis en cuántos trozos está cortado cada uno.
¡Ya estáis listos para el truco!
Pasadle un dado a alguien de tu público y que lo tire. Si saca el número tres, tú buscaras el plátano que hayas cortado y marcado antes y que sabes que está dividido en tres trozos.
Cuando lo peles, ¡verán cómo, por arte de magia, ya está cortado en los pedazos que indicaba el dado! ¡Fliparán!
El vaso equilibrista
¿Queréis que en la próxima fiesta de cumpleaños, los invitados vean un vaso de vidrio apoyándose sobre una simple carta en vertical, sin caerse? ¡Desafiad las leyes de la gravedad con este truco!
Para esta prueba necesitaréis:
- Un vaso de vidrio (pequeño, que no tenga mucho peso)
- Un par de cartas
- Tijeras
- Cinta adhesiva
Para que el truco tenga éxito tendréis que preparar previamente la carta sobre la que se sujetará el vaso. ¿Cómo? Cortad una de las cartas por la mitad y pegadla a la otra con la cinta adhesiva para que haga de “trípode”. Entonces, en realidad la carta que le enseñaréis al público tendrá una solapa invisible que desplegaréis sin que nadie se dé cuenta cuando la apoyáis sobre la mesa.
Así, tras mostrar la carta al derecho y al revés, apoyadla lentamente sobre la mesa en posición vertical desplegando disimuladamente “el trípode”. Luego, con mucha tranquilidad, poned el vaso encima de la carta y dejadlo allí, como si no pesara nada… ¡verás qué caras de sorpresa!
La carta giratoria
Este truco es un juego de manos, por eso tus niños deberán practicarlo bastante para que salga bien. Consiste en enseñar unas cartas en las que, según donde pongas los dedos, crearás la ilusión de ver otras distintas.
Previamente, solo necesitaréis fabricar dos cartas “especiales”, es decir, más grandes que lo habitual. Las puedes hacer con cartulina blanca y necesitarás un marcador rojo para pintarles los rombos, tal y como se ve en la imagen.
Una vez que las tengáis, vuestros dedos tendrán que coger práctica. ¡Tienes que ir moviéndolos mientras vas girando las cartas! Ponedlos donde os interese para hacer creer al “respetable” que está viendo otra carta. Así, tapando en una carta con dos rombos, el rombo de arriba, crearéis la ilusión de que es un as. Y si ponéis los dedos en la parta de abajo (donde en realidad no hay nada), los espectadores pensarán que es un tres de rombos…Con la carta de cinco rombos para lo mismo. Según cómo coloquéis los dedos, ¡se creerán que tiene cuatro o hasta seis rombos!
Cuando tengas mucha práctica, podrás hacerlo rápidamente y el efecto será asombroso… ¡El público se mareará de ver tantas cartas y no dejará de aplaudiros! ¡Tus hijos se habrán convertido en el alma de la fiesta!
LOS SUPERPODERES DE ARNIDOL