Ideas clave para aprender a reciclar

¿Sabes cómo reciclar correctamente? Si lo tienes claro no necesitarás leer este post. Si, por el contrario, formas parte de la mayoría que sigue sin saber muy bien en dónde va cada cosa, aquí encontrarás la guía definitiva. Con nuestras claves para reciclar, di adiós a depositar las latas en el orgánico.

Para reciclar, cada cosa a su lugar

Lo primero que tenemos que tener claro para empezar a reciclar es dónde depositar cada cosa. Y cuántos tipos de contenedores hay, claro.

Contenedor amarillo, el de los envases

Quizá sea el más popular de todos, aunque sigamos teniendo dudas respecto a lo que va dentro. ¿Qué va? Los envases. ¿Todos los envases? No, todos no. Echa al contenedor amarillo:

• Envases de plástico, como botellas (de agua, champú o productos de limpieza, etc.); bolsas de plástico (de los congelados, las golosinas, envoltorios de golosinas, etc.) o las bandejas de corcho blanco (sí, estas también se reciclan).
• Briks, da igual si llevan leche o gazpacho en su interior, si es un brik, va al amarillo.
• Envases metálicos. Latas (de conservas o de bebidas); tapas y tapones metálicos de frascos y botellas; bandejas de aluminio y aerosoles.

¿Vidrio? al iglú verde

Este parece fácil, ¿verdad? Pues no lo es. Porque no todo lo que parece vidrio lo es y porque materiales que se le asemejan no deben ir a él. En el verde van los frascos de comida y cosmética y las botellas de vidrio. ¿Qué no va en el verde? No van las bombillas, los fluorescentes, tampoco los restos de vajilla o los cristales rotos. ¿Y los cristales de ventana o las copas? Tampoco van aquí… no son de vidrio.

El contenedor azul, el que recoge el papel

¿Qué va al contenedor azul? ¡El papel! Claro, el papel y el cartón. ¿Todo? Pues, como ocurre con el vidrio, hay excepciones. No se puede depositar papel sucio (servilletas o pañuelos, por ejemplo), ni cartón manchado de grasa. Por mucho que lo lleve en el nombre, el papel aluminio no es papel y los briks van al amarillo aunque parezcan estar hechos de cartón.

Los desechos orgánicos también tienen su contenedor

En el contenedor de orgánico van todos los restos biodegradables de los alimentos, pero también otros desechos orgánicos como los papeles manchados de grasa o restos de flores o plantas que tengas en casa. En este contenedor no van restos como pañales, compresas o tampones, bastoncillos para los oídos, tiritas, etc.

El contenedor de resto, ese gran desconocido

Hay un último contenedor que es el de resto de residuos. En él se recoge todo lo que no va en ninguno de los anteriores. Así de fácil.

¡Cuelga este descargable en tu nevera!

¿Para qué sirve el punto limpio?

El punto limpio es un lugar de recogida de residuos en el que se almacenan, de manera temporal y gratuita, los restos domésticos que no van en los contenedores. Puedes ser restos peligrosos o de gran tamaño.

El espacio del punto limpio está dividido según los residuos que se almacenan en cada contenedor: pilas, aceite, muebles, medicamentos, electrodomésticos, etc. Hay uno en todas las poblaciones con más de 5000 habitantes y su uso está prohibido a las empresas.

Los niños y el reciclaje, una buena pareja

Reciclar también es cosa de niños y, si comenzamos a enseñarles desde bien pequeños, lo aprenderán de una manera natural. ¿Cómo iniciarles en el reciclaje? La forma más sencilla es plantearlo como un juego, en el que se puedan implicar y participen de manera activa. Inventa canciones que les animen a separar los residuos y a recordar en qué contenedor va cada uno, la música lo hace todo más fácil. Otra forma de ayudarles es predicar con el ejemplo, los adultos influenciamos más con nuestros comportamientos que con nuestras palabras.

¿Ya tienes claro dónde va cada cosa? ¿Te animas a cuidar un poquito más del planeta? ¡A reciclar!