• Cómo educar sin gritos

No es fácil hacerlo y a menudo caemos en la tentación de gritar. Pero tiene su recompensa.  

Educar es una dura tarea que requiere años y años de trabajo. Empieza cuando nace tu peque y perdura durante mucho tiempo. Todos los padres quieren la mejor educación para sus hijos pero hay muchos factores que influyen en ella. Además de obstáculos. El cansancio, el estrés, la falta de tiempo y otros contratiempos que van surgiendo de manera improvisada no lo ponen nada fácil. Y a menudo caemos en el recurso del grito. Pero este no ayuda, al contrario, puede influir negativamente en la educación y comportamiento futuro de nuestros hijos.

Seguramente sin pensar, de manera no premeditada, muchos padres en algún momento u otro le han gritado a sus hijos sin pensar en las consecuencias que ello puede ocasionarles. Puede hacer que pierdan autoestima, se vuelvan rebeldes, se acostumbre a gritar ellos también a ti y a los otros o les genere estrés y nerviosismo. No te engañes, siempre hay alternativas.

Qué hacer para no gritar

Intenta controlar los ataques de ira y tu comportamiento delante de tu hijo. Acuérdate de los efectos negativos que pueden causarle los gritos y las amenazas a tu peque e intenta contenerlos en los momentos de enfado.

  1. Lo ideal es siempre dirigirte a tu hijo de manera tranquila y calmada, razonando y explicándole las cosas serenamente. Unos argumentos sólidos serán más útiles que 4 gritos. El “aquí mando yo porque sí” no es válido. Busca explicaciones válidas, con sentido y claras.
  2. Trata de generar autoridad. Quizás los gritos puedan funcionar cuando ti hijo sea pequeño pero cuando llegue a la adolescencia perderán efectividad. Si, en cambio, desde pequeño le has conseguido demostrar que eres una autoridad, esto se mantendrá y es más probable que te siga guardando respeto.
  3. Ten en cuenta siempre su punto de vista. Si te pones en la piel de tu peque podrás entender sus razones y será más fácil llegar a convencerlo. Y sobre todo sé positiva. Funcionará mucho mejor.

Si este artículo sobre crianza natural te ha parecido útil, quizás también te interesen: Cómo alimentar la autoestima de tu hijo o 2 visiones de la crianza natural.

 

POST RELACIONADOS

Más artículos
3 manualidades de otoño: superpoderes contra el aburrimiento