- octubre 21st, 2021 |
Los pequeños golpes más molestos y su por qué
¿Por qué molestan los pequeños golpes en las espinillas o el codo? ¡Descúbrelo!
La diversión de los más pequeños de la casa no tiene límites. Se pueden pasar horas y horas jugando, riendo y exprimiendo el día al 100%. Y las mamás y los papás, claro, disfrutando también de esos momentos de diversión. Pero siempre hay algo que sí, que pone límites y son además muy molestos: los golpes.
Estos pequeños accidentes ponen en pausa toda esa sed de diversión. Y lo que viene después ya es prácticamente universal: susto, llanto y barra de golpes para niños. Algunos de los golpes no dejarán rastro de la pequeña tragedia, pero otros dejarán una marca que tendremos que estar viendo durante días.
El recuerdo que dejan esos golpes se convertirá después en una cicatriz de guerra, pero hasta que se cure y deje de doler, pasarán unos días. Mientras tanto debemos procurar que el peque no se golpee de nuevo en el mismo sitio. Los golpes más comunes parecen ser siempre en el mismo lugar, y basta que ya esté esa zona dolorida para que surja otro imprevisto y lo empeore. Conocemos esa historia, sí.
Los golpes más molestos para los niños: piernas y brazos
¡Cómo disfrutan los niños andando en bicicleta o con patines! Se sienten libres, los reyes del paseo y también, a veces, los soldados de la armadura. Cuando practican este tipo de deportes, los padres tendemos a protegerles con todo lo que podemos. Muñequeras, rodilleras, coderas, tobilleras… lo que encontramos y nos parece que puede salvar a los peques de un golpe.
Y no hacemos mal, al menos en algunos aspectos. Ellos tienen que disfrutar, claro está, y para ello tienen que poder moverse con normalidad. Por eso, además del casco que es imprescindible para proteger la cabeza y la frente, nunca están de más las rodilleras y coderas. Y es que, a quién no le ha pasado que se ha golpeado en esas partes del cuerpo y ha sentido, solo por unos segundos, una molestia mayor a la que se podría esperar.
Los pequeños golpes en las rodillas, las espinillas, los dedos de los pies y los codos son superficiales pero la sensación de molestia puede durar un par de minutos. Pero, ¿Qué pasa en esas partes del cuerpo? ¿Por qué parece que pueden crearnos más aflicción esas partes del cuerpo cuando ocurre un pequeño accidente?
- Los golpes en las rodillas. Las rodillas están, por decirlo de alguna manera, menos acolchadas y, es por eso, que los golpes leves producen una mayor sensación de dolor que en otras partes del cuerpo. Los niños suelen tener las rodillas llenas de moratones porque, en los pequeños accidentes, es la parte del cuerpo con la que suelen “aterrizar” en el suelo.
- Y si las rodillas no están protegidas por músculos… ¡qué vamos a decir de las espinillas! En niños, además, están en la altura perfecta para recibir golpes con escalones, objetos bajos o algunas patadas que no alcanzan el balón y terminan por golpear la pierna. De la misma forma que con la rodilla, el hueso en la espinilla está muy expuesto y por leve que sea el golpe puede producir molestia.
- Los dedos de los pies. Ese dedo pequeño que siempre choca contra las esquinas de la casa… ¡qué sensación más molesta! Uno de los golpes tontos más comunes en niños, aunque habitualmente suele ser molesto solo por unos segundos ¡por suerte!
- Un golpe en el codo es una sensación extraña que te recorre desde los dedos de las manos hasta el hombro, en ocasiones. Lo habrás escuchado muchas veces, cuando nos damos un pequeño golpe con el codo, se dice que nos golpeamos el “hueso de la risa” porque un calambre recorre el brazo entero. De nuevo, el codo es una zona donde el nervio está poco protegido. Por fortuna, esta molestia también dura poco.
Para ayudarles a calmarse después de un pequeño golpe puedes contar con remedios caseros como el hielo, recurrir a barritas para golpes y, sobre todo, acompañarlos con una alta dosis de cariño y caricias, que nunca están de más.
Los golpes más aparatosos: el recuerdo de una aventura en la frente
Por último, vamos a hablar de esos pequeños accidentes que dejan un recuerdo durante varios días. ¿Sabes a cuáles nos referimos? A los golpes en la frente de los niños, claro. Esas marcas de golpes leves que tanto llaman la atención.
Los golpes en la frente en niños son muy comunes. Correr mirando hacia otro lado o no calcular la altura de una mesa son algunas de las situaciones más comunes por las que surgen estos pequeños recuerdos en la frente. En estos casos, el hielo, las caricias y las barras de golpes para niños son los mejores aliados.
Remedios caseros para calmar a los niños los pequeños golpes molestos
No es que haya niños que son patosos y parezca que se lleven todos los golpes, pero su sed de explorar los lleva, a veces, a no ser conscientes de todos los peligros que puede conllevar una aventura. Puedes hacer eso de “sana, sana, culo de rana…”, pero nada reconforta más que algunos de los remedios caseros tradicionales que hasta nuestras abuelas utilizaban hace muchos años.
Por suerte, las supermamás y los superpapás han aprendido ya cuáles son los básicos para los pequeños accidentes en casa o qué llevar en un bolso para ir al parque o de excursión. Vamos a ver algunos de los remedios caseros para estos pequeños accidentes.
- El hielo siempre es el mejor aliado. Cuando se trata de los golpes más tontos pero molestos, utilizar hielo de forma inmediata ayuda a aliviar la sensación. Puedes aplicar cubitos de hielo con un paño, compresas de hielo o lo que puedas encontrar en el congelador. Si estás fuera, puedes pedirlo en algún establecimiento o utilizar agua fría si estás cerca de un río, por ejemplo.
- Vinagre de manzana y agua. Es una mezcla tradicional que ayuda a mejorar la circulación y aliviar así la molestia de la piel.
- Puedes preparar pomadas caseras con ingredientes naturales como el árnica, el romero o con aloe vera. Estos ingredientes pueden contribuir a calmar la zona donde ha ocurrido el incidente.
- Por supuesto, no pueden faltar las mejores caricias y cariños de los superpapás e intentar distraer al peque en los segundos en los que la molestia puede ser mayor.
LOS SUPERPODERES DE ARNIDOL