- enero 16th, 2014 |
La merienda es imprescindible para los niños. Te explicamos cómo hacerla saludable.
La merienda es una comida muy importante para los más pequeños de la casa. Si se la saltan, llegarán demasiado hambrientos a la cena y comerán más de la cuenta y, a veces, sin criterio. Lo ideal es que esté formada por una ración de hidratos de carbono, como el pan, combinada con algo de proteína, como el queso, y una pieza de fruta fresca.
Es muy importante que la merienda sea variada. Si no comemos lo mismo para cenar cada día, ¿por qué la merienda siempre es igual? La recomendación básica para que sea sana es que contenga principalmente pan y derivados, fruta fresca, frutos secos y, puntualmente, algún lácteo.
Te proponemos distintos menús para que conviertas la merienda de tus peques en un momento divertido y diferente cada día:
Lunes: un mini bocata de queso y un zumo de naranja natural.
Martes: un bol de leche con cereales y una mandarina.
Miércoles: un trozo de pan con jamón y una pera.
Jueves: un puñado de almendras y un plátano.
Viernes: un batido de cacao con un par de galletas y una manzana.
Evita que coma bollería industrial y zumos envasados. Son grasas saturadas y azúcares sin ningún interés nutricional. Escoge fruta fresca y de temporada para que sus meriendas tengan el máximo de vitaminas y minerales posible.
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