Tips para que los niños entiendan la solidaridad

Una de las cuestiones que preocupan a padres y madres en cuanto a la crianza de sus hijos es la educación en valores. El camino hacia la igualdad comienza en casa, sí, pero también el de la solidaridad, la empatía la solidaridad o el altruismo. La educación en valores puede parecer complicada. A la “ardua” tarea de enseñar, se une la explicación de esos valores. Que no es moco de pavo. Son términos abstractos que requieren de ejemplos concretos para poder ser entendidos. Es el caso de la solidaridad, un valor que está muy a la orden del día por los acontecimientos internacionales. Es una palabra que se escucha en los informativos cada día, pero, ¿cómo explicar a los niños en qué consiste?

Qué es la solidaridad

La solidaridad es un valor basado en el respeto y la empatía. Se trata de la capacidad un grupo de actuar como un todo para contribuir a la consecución de las necesidades de los demás.

El fomento de la solidaridad es algo que ha de trabajarse tanto en el aula como en casa. Para hacerlo, es interesante tratar de entender cómo ve tu hijo o hija el mundo y adecuar el mensaje para introducirlo en las actividades habituales que realizan cada día.

Algunos consejos para ser más solidarios

Si quieres que la solidaridad sea una constante en vuestras vidas, lo primero es dar ejemplo. Aquello de “haz lo que yo diga, pero no lo que yo haga” no casa bien con los peques. Y es que, aunque parezca que están pasando, se quedan con lo que ocurre a su alrededor. Papá y mamá son ejemplo para ellos. Si quieres que sean solidarios, empieza por serlo tú.

Lo habitual es que los niños y niñas no encuentren en su entorno muchos ejemplos de otras realidades. Si en tu caso los hay, puedes saltarte este paso. Busca recursos para mostrárselas. Lo normal es que hasta que no sean más mayores no vean el informativo con los adultos de casa, porque puede suponer una exposición excesiva a la información. Internet pone a vuestra disposición muchas opciones para encontrar información acerca de otros lugares del mundo, culturas o colectivos que podréis filtrar antes de enseñárselos a los peques. Bibliotecas, exposiciones o centros culturales también serán vuestros aliados. ¿Y qué decir del cine? Hay muchas películas que muestran valores. Podréis verlas en familia.

El diálogo es una herramienta educativa básica. Conversar con tu hijo o con tu hija, hablar de qué tipos de comportamiento son aceptables y cuáles no. Otra propuesta interesante es buscar juntos formas de cooperar o ayudar que hagan vuestro entorno mejor.

¿Por qué no pruebas a mostrarles el trabajo de asociaciones y fundaciones, como la Fundación Pequeño Deseo? Conocerlo de cerca les ayudará a entender mejor el fin de la solidaridad.

¿Te sigue pareciendo complicado después de descubrir estas herramientas? Cuéntanos cuáles vas a poner en marcha.