- noviembre 24th, 2017 |
Si a veces te gustaría poder salir volando para hacerlo todo más rápido. Si crees que los días deberían durar más de 24 horas. Si tu pila de cosas por hacer crece y crece… eres uno de los nuestros. Bienvenido, bienvenida, al club de los padres y madres sin tiempo.
Y es que, por más que nos esforzamos, no hay manera de alargar las jornadas. Nuestro único recurso disponible es irnos a dormir un poco más tardes y poner un poquito antes el despertador. Pero ni siquiera eso nos asegura poder tener más horas, la mayoría de las veces hay un peque que parece tener un sensor y se despierta para hacernos compañía -o no dejarnos caer en brazos de Morfeo.
Así las cosas, la optimización de recursos ha pasado a ser algo fundamental y hacerse con truquitos que permitan ahorrar tiempo es vital. Seguro que tú también tienes algunos.
¿Quieres conocer algunos superpoderes para madres y padres sin tiempo?
Los temibles bajos de pantalones y faldas
A veces vas a comprar un pantalón y no te explicas cómo va eso de los percentiles. Miras la talla, miras a tu peque, los comparas y las cuentas no te cuadran. ¡Si le sobran más de cuatro dedos de largo! Si entre tus superpoderes está el de subir bajos a la velocidad de la luz no hace falta que sigas leyendo. No lo necesitas. Nos das mil vueltas. Pero si eres de nuestro equipo, y lo de coser te suena a chino, tenemos la técnica perfecta.
¿Has oído hablar de la friselina? Se trata de una cinta termoadhesiva. Eso quiere decir que, al contacto con el calor, se pega. Ahí lo tienes. ;). Coge el bajo, marca por dónde lo quieres meter, coloca la friselina y plancha. Bajos listos en pocos minutos.
Shhh, tenemos otra variante, ¿has oído hablar de la cinta doble cara? No es lo más adecuado pero en caso de urgencia altísima puede dar el pego.
Las cintas para colgar abrigos y chaquetas
Una de las cosas que suelen pedir en los primeros cursos del cole es que las chaquetas y abrigos lleven una tira y que, además, sea larga para poder colgarlos del perchero con facilidad. Pero… ¡hemos quedado en que no sabemos coser!
No te agobies que para esto también tenemos un truco. ¿Has hecho alguna vez manualidades con trapillo? Si no es así, no te preocupes, que es algo que puedes encontrar con mucha facilidad en el bazar más próximo a tu casa. El trapillo es una tela de algodón que tiene forma similar a la de un cordón y se va a convertir en tu mejor amigo en estos menesteres.
Chaquetas y abrigos ya suelen llevar un cinta para colgarlos, pero es muy corta. Tan corta que puede que ni siquiera enganche en el perchero de la clase de tu peque. Pero a nosotros nos va a venir muy bien. Corta un trozo de trapillo lo suficientemente largo, pásalo por esa tira, haz un nudo y ¡listo! Ni agujas, ni hilos, ni nada de nada. Si no lleva esa cinta, pásalo por la etiqueta que suelen llevar cosida en la zona interior de la chaqueta en el centro de la espalda. Y si no hay ninguna de las dos… lo sentimos, en este caso sí que te va a tocar coser.
Nombre aquí, nombre allá
Todos los madres y padres con superpoderes conocemos la facilidad de nuestros vástagos para cruzar sus cosas con las de sus compañeros. No lo hacen a propósito, es que los han dibujado así, que diría Jessica Rabbit. ;). Y, claro, se hace muy necesario que todo vaya marcadito por si las moscas.
Si ya te ves dejándote la muñeca poniendo el nombre en absolutamente toooodas sus cosas, deja de sufrir. El mercado te ofrece una amplia gama de etiquetas, tanto termoadhesivas como adhesivas, con los diseños más variados para que puedas hacerlo fácilmente. También tienes la opción de hacerte con un sello personalizado, tanto artesano como tipo imprentilla, que te solucionará la papeleta.
Stop lágrimas
Y este es nuestro truco mejor guardado, nuestra artillería pesada, el mejor de nuestros superpoderes porque nos permite acabar con las lágrimas casi en un suspiro. Si tu peque le tiene un cariño especial a darse golpes con las cosas no hay nada como enseñarle la barrita de Arnidol. Mano de santo. Potencia sus propiedades con un curasana que acabe en besos y abrazos y ya verás como no hay llanto que se le resista.
¿Cuáles son tus superpoderes? ¡Cuéntanoslos!
LOS SUPERPODERES DE ARNIDOL